Generación de ingresos: la búsqueda de flujos constantes en tiempos de inestabilidad
Cuando la incertidumbre es alta, creemos que es importante encontrar formas de generar resiliencia y consistencia de la rentabilidad en las carteras. Los flujos de ingresos constantes pueden ayudar a los inversores a alcanzar el equilibrio durante ciclos de mercado turbulentos. Una vez materializados, los ingresos pueden reinvertirse en la próxima gran oportunidad, por lo que son una potente forma de diversificación por derecho propio. Creemos que el atractivo de los ingresos estables se ha intensificado en un mundo en el que la incertidumbre macroeconómica y política podría generar dispersión y volatilidad en el mercado. En lugar de simplemente “perseguir el rendimiento” o intentar predecir el comportamiento del mercado, creemos que las estrategias con matices y agilidad que captan ingresos diversificados del mercado cotizado pueden ayudar a obtener resultados positivos.
Capturar ingresos en renta fija
Los ingresos, junto con la diversificación y la estabilidad, son una ventaja estratégica clave de incorporar bonos a las carteras de inversión. Estos atributos destacan durante periodos de volatilidad del mercado causados por caídas del mercado de renta variable, como las fuertes correcciones de los valores relacionados con la IA de EE. UU. en enero, o episodios bajistas relacionados con el crecimiento como en agosto de 2024. El crédito corporativo y titulizado sigue ofreciendo un atractivo potencial de ingresos respaldado por sólidos fundamentales de crédito. Creemos que la selección activa de valores será clave para la generación de ingresos a medida que avanza este año incierto.
Crédito corporativo
Los valores high yield ofrecen un potencial de ingresos históricamente atractivo en todo el crédito corporativo, pero los ajustados diferenciales son el elefante en la cacharrería. Los reducidos niveles de rendimiento adicional que se reciben por prestar a empresas en lugar de invertir en bonos gubernamentales sugieren que los inversores deberían ser selectivos. Sin embargo, el actual entorno de diferenciales ajustados también refleja unos fundamentales de crédito saludables. Una ampliación sustancial y sostenida de los diferenciales requeriría un cambio significativo en los fundamentales de crédito o una repentina y pronunciada recesión económica, un resultado poco probable a corto plazo según nuestro análisis. Dado que la mayor parte de los ingresos de los bonos corporativos en la actualidad provienen de los tipos de interés altos en lugar de los diferenciales de crédito, pueden mitigarse los riesgos bajistas que surgen de la volatilidad del mercado de renta variable o del deterioro del crecimiento económico.

Fuente: Macrobond, Goldman Sachs Asset Management. A 11 de febrero de 2025. Las rentabilidades se basan en los índices respectivos y no representan la rentabilidad de ningún producto de Goldman Sachs. No es posible invertir en índices no gestionados. Rentabilidades pasadas no son una predicción de las rentabilidades futuras y no garantizan los resultados futuros, que pueden variar.

Fuente: Macrobond, Goldman Sachs Asset Management. A 11 de febrero de 2025. Las rentabilidades se basan en los índices respectivos y no representan la rentabilidad de ningún producto de Goldman Sachs. No es posible invertir en índices no gestionados. Rentabilidades pasadas no son una predicción de las rentabilidades futuras y no garantizan los resultados futuros, que pueden variar.
El apetito por el riesgo sigue siendo robusto en el ámbito del crédito con grado de inversión (IG), especialmente en el caso de los bonos IG en dólares estadounidenses, lo que se evidencia en las bajas concesiones de nuevas emisiones, los diferenciales casi récord, las importantes entradas de capital en fondos de inversión y la continua demanda neta extranjera.1 Creemos que los fundamentales del crédito corporativo IG se mantienen saludables en conjunto, con buenas cifras generales en cuanto a métricas de crédito clave como el apalancamiento, la capacidad de administración de deuda, la rentabilidad y las posiciones de liquidez. Aun así, creemos que es crucial separar a las empresas que son financieramente sólidas o que están en una trayectoria de mejora frente a las que muestran debilidad a través de la selección de valores bottom-up.
La posibilidad de un entorno normativo más relajado en EE. UU. durante la segunda legislatura de Trump puede propiciar un aumento de la actividad de fusiones y adquisiciones financiada por deuda, lo que podría suponer un reto para la posición financiera de los emisores corporativos. Sin embargo, las fusiones y adquisiciones también se pueden financiar con renta variable o liquidez. También pueden conducir a mejoras a largo plazo en el rendimiento operativo y en los fundamentales de crédito. Favorecemos la generación de ingresos de los bonos de crédito industrial con grado de inversión, de calificación BBB en sectores como los bienes de consumo no cíclicos, los bienes de capital y la tecnología, donde los equipos directivos buscan mantener calificaciones de grado de inversión y mejorar la salud del balance.
Al igual que el crédito IG, los diferenciales de crédito apalancado son ajustados, especialmente en el high yield (HY) estadounidense. Algunos inversores pueden considerar que los diferenciales comprimidos son una posible razón para evitar la clase de activos. En nuestra opinión, los diferenciales inferiores a la media, de forma aislada, no son necesariamente un signo de peligro y deben analizarse en el contexto del mercado general, incluidos los niveles de rendimiento absoluto, los fundamentales de crédito y las tendencias de underwriting. Es alentador que apenas se observe un descenso en los estándares de underwriting. Como reflejo de la mejora de la calidad crediticia, la cuota de deuda con calificación BB, la calificación más amplia dentro del high yield, ha aumentado del 35 % en 2013 al 50 % en la actualidad.2

Fuente: Macrobond, ICE BofA US High Yield Constrained Index Market Capitalization. Enero de 2025.
Aunque las noticias recientes han destacado un aumento de las quiebras corporativas, creemos que la realidad es más tranquilizadora. El reciente repunte de las quiebras refleja una vuelta a los niveles normales y no una tendencia preocupante, ya que la tasa anual permanece por debajo de la media de 2015-2019.3 Nuestro análisis sugiere que las tasas de impago en los mercados de préstamo high yield y apalancados seguirán contenidas en 2025. Para contextualizar, nuestro equipo estimaba la tasa de impago en EE. UU. en el 1 % en 2024, cerca de la tasa realizada del 1,3 % frente a las estimaciones del sector que superaban el 3 %.4 En nuestra opinión, esto demuestra el valor del análisis bottom-up de las empresas.
Crédito titulizado
El crédito titulizado se presenta en una variedad de formas, normalmente con correlaciones relativamente bajas y rendimientos más elevados que los bonos corporativos de calificación similar.5 Dos categorías que favorecemos son las obligaciones garantizadas por préstamos (CLO), que a menudo comprenden un conjunto diversificado de préstamos corporativos sin grado de inversión con garantía preferente, y títulos con garantías hipotecarias comerciales (CMBS) respaldados por inmuebles comerciales (CRE).
Durante la crisis financiera mundial, los impagos en el crédito titulizado se produjeron principalmente en hipotecas residenciales de alto riesgo y productos estructurados complejos. Las estructuras de titulización son ahora más sencillas y transparentes, con normas de préstamo más estrictas. Sin embargo, la clase de activos sigue precisando una diligencia debida y experiencia exhaustivas. Creemos que identificar los desajustes y aprovechar las ineficiencias estructurales es crucial para captar ingresos y gestionar el riesgo. En nuestra opinión, esto también exige un proceso de inversión disciplinado y un análisis profundo del colateral y las estructuras de los acuerdos.
Vemos un atractivo potencial de ingresos en las CLO de alta calidad. La naturaleza de tipo variable de las CLO significa que los elevados tipos actuales proporcionan niveles de ingresos atractivos. En cada nivel de rating, las CLO han ofrecido históricamente rendimientos más elevados que los bonos y préstamos corporativos de calificación similar. Una característica clave de las CLO es que el colateral lo gestiona un gestor de CLO. En un mundo en el que la selección de crédito es crucial, favorecemos a los gestores que gestionan de forma eficaz sus fondos de garantía y buscamos activamente gestores con un solapamiento mínimo de garantías para asegurar la diversificación entre exposiciones.

Fuente: Goldman Sachs Global Investment Research The Structured Credit Trader, a 20 de febrero de 2025. Índice J.P.Morgan US CLOIE AAA, a 27 de febrero de 2025. S&P 500 Default, Transition, and Recovery: 2023 Annual Global Leveraged Loan CLO Default And Rating Transition Study, junio de 2024. Rentabilidades pasadas no son una predicción de las rentabilidades futuras y no garantizan los resultados futuros, que pueden variar.
El sector CRE de oficinas se ha enfrentado a desafíos durante los últimos años debido a los elevados tipos de interés y las tendencias de teletrabajo y trabajo híbrido. Sin embargo, creemos que no todos los CRE son iguales. La clase de activos puede ofrecer exposición diversificada a una gama de CRE subyacentes con flujos de efectivo estables. Muchas operaciones de CMBS también tienen características de mejora del crédito como subordinación y sobrecolateralización, y cuentas de reserva. Creemos que los inversores activos están mejor posicionados para capitalizar las posibles oportunidades, incluyendo en algunos CMBS relacionados con oficinas, donde vencerán muchos alquileres previos a la COVID-19, lo que podría proporcionar claridad sobre el equilibrio entre la oferta y la demanda.
Estamos supervisando el posible impacto de la nueva administración estadounidense en los sectores titulizados. Las políticas de impulso al crecimiento combinadas con tipos más bajos y un equilibrio más estable entre la oferta y la demanda podrían mejorar las perspectivas del sector CRE de oficinas, mientras que las regulaciones más laxas podrían impulsar las fusiones y adquisiciones y la actividad de buy-out apalancada (LBO), lo que conduciría a un año potencialmente sólido para los préstamos apalancados y la nueva oferta de CLO.
Elementos esenciales de la rentabilidad de la renta variable
¿Dividendos para impulsar las rentabilidades?
Las valoraciones elevadas no se limitan a unos diferenciales ajustados de los bonos corporativos. El mercado de renta variable estadounidense ha experimentado un aumento extraordinario del valor desde la crisis financiera mundial, impulsado más recientemente por las acciones tecnológicas de gran capitalización. Esto ha llevado la ponderación de EE. UU. en el índice MSCI World hasta el 74 % en comparación con el 53 % del año 2000.6 La expansión de las ratios precio-beneficio significa que el amplio mercado de renta variable estadounidense sigue cotizando a valoraciones cercanas a los récords, incluso cuando se excluyen las principales empresas tecnológicas.7
Si bien la expansión de las valoraciones impulsó la mayor parte de la rentabilidad de la renta variable a nivel mundial en 2024, las estimaciones sugieren que los beneficios y los dividendos se convertirán en mayores impulsores de la rentabilidad de los índices en 2025.8 Esperamos que la estructura de rentabilidad del mercado bursátil se amplíe más allá de los valores de megacapitalización estadounidenses. Dada la alta concentración en EE. UU. con los 7 Magníficos y la disrupción en la tecnología impulsada por la IA, creemos que la diversificación en otras regiones y sectores puede proporcionar oportunidades potenciales para los inversores activos. Centrarse en empresas con sólidos fundamentales y rendimientos de dividendos financieramente sostenibles puede ayudar a manejar grandes correcciones del mercado. Sectores como el financiero, los servicios públicos y los bienes de consumo básico son históricamente menos cíclicos que las acciones de crecimiento de EE. UU. y generalmente proporcionan un flujo estable de ingresos por dividendos que incrementa la resiliencia total de la cartera.
Las empresas de otros mercados internacionales, específicamente en Europa y Japón, han mostrado históricamente un compromiso más fuerte con el pago de dividendos a los accionistas. En el índice MSCI EAFE (Europa, Australasia, Extremo Oriente), los dividendos representan el 70 % de su rentabilidad total acumulada en los últimos 20 años. Creemos que el universo de los mercados emergentes también ofrece atractivas oportunidades. Tras la crisis financiera, más empresas de ME han pagado dividendos que sus homólogas de mercados desarrollados y más del 50 % de las acciones de los mercados emergentes pagan un rendimiento de dividendos de más del 3 %.9 Creemos que un enfoque activo puede ayudar a identificar empresas que demuestren crecimiento de dividendos y sostenibilidad del rendimiento.

Fuente: Contribución a la rentabilidad de los índices globales de Goldman Sachs Global Investment Research en 2024 en divisa local. A 18 de diciembre de 2025. Únicamente a efectos ilustrativos. No es posible invertir en índices no gestionados. Rentabilidades pasadas no son una predicción de las rentabilidades futuras y no garantizan los resultados futuros, que pueden variar.

Fuente: Goldman Sachs Global Investment Research. Previsión de rentabilidad total a 12 meses en divisa local. A 18 de diciembre de 2025. Únicamente a efectos ilustrativos. No es posible invertir en índices no gestionados. Rentabilidades pasadas no son una predicción de las rentabilidades futuras y no garantizan los resultados futuros, que pueden variar.
Históricamente, las acciones que pagan dividendos han obtenido mejores resultados en periodos de menor crecimiento e inflación persistente. En estos entornos, las estrategias centradas en empresas con un mayor potencial de crecimiento de los dividendos generalmente obtienen mejores resultados que las estrategias que identifican a los pagadores de dividendos más altos de todo el universo de inversión en términos absolutos. Creemos que la gestión activa puede ayudar a evitar empresas muy apalancadas que pagan altos dividendos en favor de empresas de calidad con sólidos fundamentales y rentabilidad por dividendo, así como acciones financieramente sostenibles que también muestren potencial de revalorización del capital.
¿Auge de las recompras?
Además de los dividendos, las recompras de acciones están creciendo fuera de EE. UU. como fuente de rentabilidad para los accionistas. Históricamente, las recompras en Europa han tendido a ser pequeñas y poco frecuentes, especialmente en comparación con EE. UU.10 Sin embargo, las recompras han aumentado y el rendimiento de las recompras se ha convertido en un componente importante de la rentabilidad total de las acciones europeas. Las empresas del índice STOXX Europe 600 anunciaron programas de recompra de acciones de unos 290 000 millones de euros el año pasado11, lo que convierte 2024 en el tercer año de mayor volumen de recompra hasta la fecha. Las recompras generaron un rendimiento del 1,9 % para el STOXX 600 y contribuyeron el 40 % del rendimiento total de los accionistas. Las empresas de energía, finanzas y consumo discrecional fueron los principales actores en el panorama de la recompra, aunque el fenómeno de la recompra no se concentra exclusivamente en los sectores de valor. Creemos que el aumento de la rentabilidad del capital refleja unos fundamentales corporativos sólidos.
Las recompras de acciones también parecen ayudar a gestionar la presión bajista del mercado bursátil: las empresas con altos volúmenes de recompra han experimentado generalmente caídas más pequeñas. Esperamos que la fuerte actividad de recompra continúe en 2025 y ofrezca alfa a los inversores en un contexto macroeconómico europeo moderado y la incertidumbre sobre las políticas comerciales de la administración Trump en EE. UU.
Diversificación de los flujos de ingresos
Observamos oportunidades potenciales para complementar la generación de ingresos tradicional en los mercados de acciones y bonos a través de enfoques dinámicos de renta fija activa y estrategias de "buy-write" en renta variable.
Renta fija dinámica
Creemos que las estrategias de bonos dinámicas o sin restricciones ofrecen la flexibilidad para invertir en una amplia gama de títulos de renta fija sin limitarse a un índice de referencia específico. En nuestra opinión, este enfoque puede ayudar a identificar las rentabilidades ajustadas al riesgo más atractivas en todos los sectores de diferenciales de renta fija, incluidos el crédito con grado de inversión y high yield, así como la deuda de mercados emergentes y el crédito titulizado. Creemos que la incertidumbre geopolítica y los cambios estructurales, como la digitalización y la descarbonización, combinados con el potencial de un nuevo paradigma de políticas poselectorales, proporcionan motivos adicionales para ajustar dinámicamente las asignaciones por sector, rating y duración. Favorecemos las estrategias ágiles con rotación fluida entre sectores, zonas geográficas y emisores en respuesta a las oportunidades de mercado, respaldadas por análisis fundamentales y cuantitativos.
Consideración de todas las opciones
Para captar potencialmente ingresos adicionales y gestionar el riesgo de pérdidas en 2025, existen formas de combinar la exposición al índice de renta variable principal (es decir, S&P 500, Nasdaq) con opciones gestionadas activamente. Los ETF de "buy-write", también conocidos como fondos de compra con cobertura, están diseñados para este propósito y buscan proporcionar un perfil de rentabilidad más defensivo y con volatilidad moderada frente a las exposiciones long-only. En otras palabras, al asignar a estrategias de "buy-write", los inversores eligen renunciar a cierta subida de la renta variable a cambio de una menor volatilidad e ingresos superiores a los dividendos de la renta variable. Este enfoque puede ayudar a proporcionar fuentes diversificadas de ingresos para maximizar el potencial alcista a la vez que preserva la revalorización del capital a largo plazo.
El año de los ingresos
En un entorno de mercado volátil, creemos que capturar flujos de ingresos estables de acciones y bonos es crucial para mantener la estabilidad de la cartera. La selección activa de valores y los enfoques de inversión dinámicos pueden ayudar a los inversores a encontrar oportunidades en el crédito corporativo y titulizado, que ofrecen diversificación y un atractivo potencial de ingresos. Además, centrarse en acciones con dividendos sostenibles y perfiles de recompra puede mejorar la estabilidad de la rentabilidad y optimizar la gestión del riesgo de caídas. Diversificar las fuentes de ingresos a través de estrategias dinámicas de renta fija y enfoques de "buy-write" de renta variable podría optimizar aún más las rentabilidades ajustadas al riesgo. En última instancia, una estrategia de ingresos bien equilibrada puede ayudar a los inversores a sortear las incertidumbres del mercado y seguir recibiendo dividendos a largo plazo.
1 Goldman Sachs Global Investment Research. A 23 de enero de 2025.
2 JP Morgan. A 1 de diciembre de 2024.
3 Macrobond, Goldman Sachs Asset Management. Basado en los expedientes de quiebra total notificados por el American Bankruptcy Institute. Últimos datos publicados el 3 de enero de 2025.
4 Goldman Sachs Asset Management. A 31 de diciembre de 2024. Fuente de la tasa de impago publicada: J.P. Morgan. Noviembre de 2024.
5 Goldman Sachs Asset Management, Credit Suisse, JP Morgan, Bloomberg, CRTx. Datos a 31 de diciembre de 2024.
6 MSCI. A 31 de diciembre de 2024.
7 Goldman Sachs Global Investment Research. A 18 noviembre de 2024.
8 Goldman Sachs Global Investment Research. A 18 de diciembre de 2025.
9 Goldman Sachs Asset Management, MSCI. Rentabilidad acumulada a cinco años del índice MSCI EM en abril de 2024. Rentabilidades pasadas no son una predicción de las rentabilidades futuras y no garantizan los resultados futuros, que pueden variar.
10 Goldman Sachs Global Investment Research. A 23 de abril de 2024.
11 Barclays Buyback Monitor. A 9 de enero de 2025.
